Si eres dueño de un gato y necesitas viajar en avión, es importante que sigas algunos consejos para que tu mascota viaje de la forma más cómoda y segura posible. Antes que nada, es importante mencionar que, si no es realmente necesario viajar con tu gato, es mejor dejarlo tranquilo en casa.
Lo que leeras:
ToggleEl primer paso para viajar en avión con tu gato es familiarizarlo con la transportadora que utilizarás. Mientras más familiarizado esté tu gato con ella, mejor será su experiencia durante el vuelo.
Además, puedes rociar el interior de la transportadora de gatos con un spray de feromonas que promueva un estado de tranquilidad en tu mascota.
Otro aspecto importante para viajar en avión con tu gato es que aprenda a utilizar un arnés para que puedas emplear una correa aún dentro de la transportadora. De esta forma, podrás sacarlo para realizar las necesidades fisiológicas o para darle agua y comida.
Es necesario que compruebes si la aerolínea que deseas utilizar acepta gatos en sus vuelos. No todas las aerolíneas permiten que los gatos viajen en sus aviones y algunas tienen restricciones específicas respecto a la raza de los gatos.
En este sentido, es importante mencionar que la mayoría de las aerolíneas no permiten que gatos braquicéfalos, como los persas o los birmanos, viajen en sus vuelos debido a su estructura facial.
Para viajar en avión con tu gato, es necesario que cuentes con un pasaporte de tu mascota y otros certificados y comprobantes veterinarios.
Estos requisitos pueden variar dependiendo del país de salida y de llegada.
Por lo tanto, es recomendable que acudas a tu veterinario unos días antes de realizar el vuelo para que realice una exploración y elabore un certificado de salud que garantice que tu gato se encuentra en óptimas condiciones de salud y que está desparasitado.
Una buena práctica es darle la última comida y bebida a tu gato entre 2 y 3 horas antes de la hora de volar. De esta forma, podrá aguantar mejor las ganas de evacuar, ya que en el avión será imposible que vaya a su caja de arena.
Además, no es muy recomendable administrar sedantes o tranquilizantes a tu gato durante el vuelo, por lo que es importante que consultes con tu veterinario qué otras opciones existen para minimizar su posible estrés.
Por último, es recomendable que lleves una manta para tapar la transportadora mientras sea posible y que tu mascota esté menos expuesta a todos los estímulos que hay en los aeropuertos y aviones.
Pregunta el tiempo de registro y de recolección, por lo general serán algunas horas.
Siguiendo estos consejos, podrás viajar en avión con tu gato de forma segura y cómoda.
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